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Conversión al Islam y Nacionalismo Étnico en Malasia

Este artículo es parte de un proyecto de investigación más amplio que se centra en el surgimiento del nacionalismo y la supremacía étnica malaya en Malasia. Si bien el ascenso del nacionalismo étnico malayo puede atribuirse a varios factores, este artículo se centra específicamente en la ley de conversión islámica en Malasia y en si ha reforzado o no el sentimiento de supremacía étnica malaya. Malasia es un país multiétnico y multireligioso que obtuvo su independencia de los británicos en 1957. Los malayos, al ser el grupo étnico más grande, siempre han considerado la religión del Islam como parte integral de su identidad que los separa de otros grupos étnicos que fueron traídos al país durante el dominio colonial británico. Si bien el Islam es la religión oficial, la Constitución permite que los malayos no malayos, es decir, los chinos y los indios étnicos, practiquen pacíficamente otras religiones. Sin embargo, la ley islámica que rige los matrimonios musulmanes en Malasia exige que los no musulmanes deben convertirse al Islam si desean casarse con musulmanes. En este artículo, sostengo que la ley de conversión islámica se ha utilizado como una herramienta para fortalecer el sentimiento de nacionalismo étnico malayo en Malasia. Los datos preliminares se recopilaron a partir de entrevistas con musulmanes malayos casados ​​con no malayos. Los resultados han demostrado que la mayoría de los entrevistados malayos consideran la conversión al Islam como un imperativo tal como lo exigen la religión islámica y la ley estatal. Además, tampoco ven ninguna razón por la que los no malayos se opongan a convertirse al Islam, ya que al casarse, los niños automáticamente serán considerados malayos según la Constitución, que también conlleva estatus y privilegios. Las opiniones de los no malayos que se convirtieron al Islam se basaron en entrevistas secundarias realizadas por otros académicos. Como ser musulmán está asociado con ser malayo, muchos no malayos que se convirtieron se sienten despojados de su sentido de identidad religiosa y étnica, y se sienten presionados a abrazar la cultura étnica malaya. Si bien cambiar la ley de conversión podría ser difícil, los diálogos interreligiosos abiertos en las escuelas y en los sectores públicos podrían ser el primer paso para abordar este problema.

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